Con pesos de tipo Goliath
Dako Worldwide Transport de Düsseldorf en América Latina
La primera impresión que se lleva cuando se ve la galería de fotos y videos de la empresa de transporte de carga pesada DACOTRANS que existe un aire de de aventura, naturaleza silvestre y hombres trabajadores:
Se transportan cargas de más de 100 toneladas sobre afluentes donde rara vez se ve una canoa. Estas cargas transitan por temblorosos puentes que han sido previamente reforzados para no sucumbir al vacío. Por otra parte, corpulentos camiones de similares características se abren camino a través de estrechas e inseguras curvas cerradas “en medio de la nada”, con escaso aire de montaña y con 1000 caballos de fuerza hasta arribar a su destino.
Ralf Grosskopf dirige un negocio familiar en el ámbito de la logística, tal y como lo hizo su padre. “Desde los años 60 hemos somos una empresa internacional activa y exitosa en el transporte de carga ofreciendo despachos centrados en la entrega de soluciones, sin jamás pensar en cambiar nuestro servicio”, relata Ralf. Sin embargo, los años 90 trajeron distintos aires. “Inesperadamente recibimos un encargo que nos permitió fundar nuestra primera empresa para el transporte de cargas pesadas en América Latina, que nombramos DACO Heavy Lift de Centroamérica”, según cuenta Grosskopf.
En aquél entonces, Dako se adjudicó un contrato para transportar una central térmica a una fábrica de azúcar en Guatemala. “En esa época, simplemente, no había nadie en América Central que pudiera
–técnicamente– hacerse cargo de este servicio. No había ningún vehículo motorizado capaz de transportar 90 toneladas, a pesar de la ´Tolerancia Centroamericana´, recuerda claramente Grosskopf. Fue por esta razón que Dako importó temporalmente y por una gran suma de dinero un vehículo desde Estados Unidos. “La falta de infraestructura nos obligó a actuar y convertirnos en transportistas”. Las partes a suministrar por contrato se hicieron cada vez más grandes. “Por lo tanto, compramos en Europa un vehículo hidráulico y otro más. Sin embargo, ambos camiones no eran compatibles, allí cometimos todos los errores que pudiéramos realizar”.
Central de motores diésel para Costa Rica
El año 2009: Dako Worldwide Transport debe transportar varios componentes para la construcción de una nueva central de motores diésel desde el puerto en la ciudad de Caldera a aproximadamente 30 km de allí a la región del Pacífico en Costa Rica. Hubo que transportar 45.000 toneladas de carga, incluyendo 11 grandes motores diésel con más de 300 toneladas de peso y unos 14 metros de largo, cinco de ancho y siete de alto desde Europa o Asia al sitio de construcción.
Con la existencia de la Carretera Panamericana, uno pensaría que no se encontraría con problemas puesto que es una carretera que atraviesa el largo del continente. Sin embargo, las autoridades de Costa Rica no permiten el transporte de cargas pesadas sobre las carreteras existentes, ya que, existen muchos puentes que no son aptos para soportar el peso transportado y aún más, se debe considerar una gran cantidad de monos silvestres que se alojan en la copa de los árboles. Así, el remolque hidráulico de 18 ejes y de más de ocho metros de alto, sobresaltarían a los simios; por ello tuvimos que tomar rutas legales alternativas para llegar el destino previsto.
Gracias a un sobrevuelo observado por un trabajador de la empresa, se descubre una línea férrea en desuso, y Dako finalmente, la usa en forma temporal como carretera. En ese momento aún faltaba resolver algunos pequeños detalles… se tuvo que cruzar un río sin puente y construir un camino que atravesara una plantación de caña de azúcar. Hubo que construir un vado de concreto que atravesara el Río Barranca, lo que requirió desviar el río momentáneamente. Además, se tuvo que construir un camino de aprox. 10 km. a lo largo de una plantación, donde unas 13.000 toneladas de gravilla fueron transportadas y procesadas. Internamente, todo el proceso, incluyendo el uso de los sobrepuentes de la empresa sobre diez pequeños puentes que cruzaban el río, es tomado como "de menor importancia".
Procesos administrativos: para poder realizar esta labor, se tuvo que obtener la autorización de transporte de parte de las autoridades costarricenses; firmar el acuerdo con la compañía nacional ferroviaria; conseguir los permisos necesarios del Instituto del Medio Ambiente para poder cruzar el Río Barranca; lograr la aprobación de los propietarios de las plantaciones de caña de azúcar y la completa autorización de transporte del Ministerio de Transporte. Además, hubo que incluir la planificación internacional del transporte desde los países fabricantes, el embarque y los extensos trámites aduaneros.
Luego de nueve meses de preparativos, el proyecto comenzó a inicios del 2010. La naturaleza desbarató el progreso del proyecto; lluvias torrenciales en agosto de aquél año los obligó a ejecutar un plan B. Por ello, la opción fue el transporte por vía fluvial, y el desembarque por rampas de carga y de descarga que fueron rápidamente construidas en el borde costero que luego tuvieron que ser desmanteladas… ¿Cómo hubiera funcionado eso en Alemania?